
La estrategia es sobre hacer elecciones
Recuerdo que mi primer encuentro formal con el tema de la estrategia de negocios fue cuando estaba cursando mi MBA, y no es que me esté haciendo ya muy viejo, pero fue hace ya casi dos décadas.
En una clase de este posgrado, cuya titular era una profesora extranjera que estaba de intercambio, hablábamos de temas como ventajas competitivas sostenibles, análisis de cinco fuerzas, cadenas de valor, posicionamiento y el famoso análisis FODA. A partir de ahí, por mucho tiempo formé parte de una corriente que ha dominado la forma de entender la estrategia en el mundo de los negocios.
Sin embargo, la estrategia —así como el mundo de los negocios— está frente a un nuevo paradigma, ya que las metodologías y herramientas de ese pensamiento tradicional de la estrategia ya no son capaces de explicar de forma adecuada nuestro mundo. Esto se debe a que dichas estrategias fueron pensadas para un mundo donde el cambio y la disrupción eran la excepción, donde la principal tarea de la estrategia era simplemente defender su ventaja competitiva, de la cual se podrían aprovechar sus frutos durante muchos años, un mundo donde el futuro se esperaba que fuera muy parecido al pasado y presente.
Rita McGrath, profesora de la Universidad de Columbia, y una de las personalidades más influyentes en el mundo de la estrategia y la innovación, considera que el problema de la estrategia es que “Estamos trabajando con herramientas y supuestos desactualizados”.

“La estrategia se trata de hacer elecciones (en qué arenas competir y cómo ganar ahí), para que tu empresa sea capaz de ganar en el largo plazo.”
El actual mundo de la estrategia, que la entiende con un enfoque de innovación, considera cinco grandes cambios:
1) La disrupción es simplemente la nueva normalidad.
2) La velocidad y la complejidad del cambio se ha acelerado.
3) El tiempo de vida de los corporativos se está reduciendo.
4) Los modelos de negocio tradicionales están siendo desplazados.
5) Las empresas necesitan ser ambidiestras (reposicionar su negocio actual, al mismo tiempo que crean su motor de crecimiento futuro).

Ante esta nueva realidad, nuevas voces, metodologías y herramientas han surgido. Desafortunadamente, el memo no ha llegado para la mayoría de las empresas, que siguen empleando una perspectiva tradicional de la estrategia, con lo cual no es sorpresa que su estrategia siga siendo la misma que han planteado toda su vida: “hagamos lo de siempre, a menor costo, y más rápido”
Por cierto, una propuesta que busca ser la opción más barata no es en sí mala, solo que en cualquier industria sólo puede existir un líder en costos. Y si no es tu empresa, entonces estarás en problemas.
Uno de los grandes retos que actualmente enfrentan las empresas es crear su motor de crecimiento futuro, pues ya no funcionan como antes las herramientas de eficiencia operativa; en la actualidad son fundamentales las herramientas de innovación y un enfoque de inversión como el que emplean la empresas de capital de riesgo. Sin embargo, estos dos últimos aspectos no son la fortaleza de las empresas, ya que fueron construidas para explotar, no para explorar. Y si esto no fuera suficiente, surgirán tensiones entre el negocio actual y el negocio del futuro, así que el equipo directivo deberá desarrollar nuevas capacidades de liderazgo.
Mi principal recomendación es que el enfoque de estrategia que utilices en tu empresa debe contemplar este nuevo mundo. En futuras ediciones, hablaremos de quienes son estas nuevas voces en el mundo de la estrategia, en qué consiste su propuesta y cómo podemos conciliarlas durante el desarrollo de nuestra estrategia de negocio.
Por Javier Sevilla, Fundador de Novarek